Nada detiene un trabajo más rápido que una broca que se atasca violentamente o se rompe dentro de un agujero profundo. A continuación, le indicamos cómo manejar la situación como un profesional.
1. Por qué se atascan las brocas (los 3 culpables)
- Golpe contra una barra de refuerzo: en el hormigón, golpear una barra de refuerzo de acero detendrá instantáneamente una broca de dos cortadores. La punta se engancha en la nervadura de acero.
- Acumulación de residuos: si no se saca la broca con frecuencia para limpiar el polvo, la ranura se llena y se bloquea. La fricción bloquea la broca en su sitio.
- Atascamiento (cambio de ángulo): si se sujeta el taladro torcido a mitad del proceso, la broca se dobla y se atasca contra las paredes rectas del agujero.
2. El embrague de seguridad: su mejor amigo
Si su pesado martillo perforador emite de repente un fuerte sonido CLIC-CLIC-CLIC y la broca deja de girar, no se asuste. Se trata del embrague de seguridad.
Ha evitado que se rompiera la muñeca. Deténgase inmediatamente. Ponga el taladro en marcha atrás y retírelo con cuidado. NO apriete más el gatillo.
3. Misión de rescate: retirar una broca rota
Escenario A: sobresale
fácilmente. Sujete unos alicates de bloqueo (Vice-Grips) perpendiculares al vástago y gírelos en sentido antihorario mientras tira.
Escenario B: Al ras o profundo
Difícil. Puede probar con un imán potente (para brocas sueltas) o con unos alicates de punta fina. Si está muy atascada y profunda, a menudo hay que abandonar el agujero. Rellénelo con masilla y taladre un nuevo agujero a 5 cm de distancia.
4. Prevención: picoteo y limpieza
La regla número uno para los agujeros profundos es picotear.
Taladre 1 pulgada -> Retire para limpiar el polvo -> Taladre 1 pulgada -> Retire.
Esto mantiene la ranura vacía y la broca fría. Si intenta taladrar 15 cm de una sola vez, es muy probable que se atasque.